Este árbol era de Luis Vila, pero en el 2006 conseguí llegar a un acuerdo con él y me lo traje a casa, era la primera sabina con un poco de calidad que conseguía y la emoción inicial dejó paso a la desilusión cuando me di cuenta de lo lejos que estaba el verde, pero como ya estaba en casa, había que meterle mano
lo primero fué un transplante para cambiar la tierra y levantar el árbol a una posición próxima a la definitiva
Este era el aspecto después de una brotación más, hace dos años y pico que esta en casa y todavía no se ha hecho practicamente nada, había que meterle mano
algunas ramas simplemente se enrafiaron, primero a lo largo
y después a lo ancho
y con un poco de alambre ya tenemos una futura primera rama en su sitio
detalle del movimiento que se le dió
esta va a cambiar radicalmente de posición
un par de alambres gorditos
y ya tenemos rama para el ápice y la izquierda
esta necesitaba separarse de la madera muerta para doblarla
una vez separada
y enrafiada
este es el resultado, se ha dejado la rama más larga de momento, aunque evidentemente en un futuro se cortará
de momento solo se ha alambrado cada rama principal, con los nuevos crecimientos ya se irá afinando un poco más
lateral
trasera
lateral, por lo menos ahora tenemos verde alrededor del tronco, definir cada cosa es cuestión de tiempo
4 comentarios:
Hola Alberto, bonita sabina, ¿no te planteas nunca injertar?.
Saludos.
Tomeu.
Gran trabajo Alberto, seguro que en el futuro nos deleitará el resultado final.
Albertooooorrr, que cabroncete que no les has puesto el final, huy ya he desvelado el secreto.
Luis V.
Hola Tomeu,
es la segunda vez que me haces la misma pregunta con respecto a este árbol,se ve que no te gusta mucho, je,je
la verdad es que estamos empezando a preparar plantones de itoigawa para futuros injertos, en plantas que sin ellos son imposibles,mientras creamos los plantones y mejoramos la tecnica, se va haciendo lo que se puede...
un saludo
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