el reto

cuando llegó este pino a casa, realmente no tenía muy claro lo que me había traído, aunque el primer tramo era increible, el verde estába a mas de 1,50 metros del tronco
Lo primero que hice fué pasarlo a una maceta de bonsai, sin ni siquiera tener muy claro lo que iba a hacer con él



 finalmente me decidí por el injerto, ya que si lo intentaba compactar mediante torsiones iba a quedar un burruño de ramas muy antiestético, además así podía acortar el tramo recto que se ve en la imagen superior

una vez que el injerto prendió empecé a eliminar el verde original

hasta quedarme solo con el verde donde interesaba

a partir de ese momento la prioridad era que la planta creciese vigorosa para crear ramas con las que trabajar, como podeis ver, objetivo cumplido

crecimientos de hasta 22 cm en un año, nos van a permitir este otoño por fin, empezar a pensar en un diseño depués de 6-7 años

os dejo algunos detalles del árbol, así me lo miro desde distintos sitios, a ver si se me ocurre algo...