INJERTO DE BELLOTA
Autor: Alberto Baleato
Desde siempre el roble ha estado muy ligado al pueblo gallego, no sólo por su gran presencia en nuestros montes, sino también en nuestra cultura y en nuestras tradiciones. Todo esto lo ha convertido en un árbol emblemático, que siempre he deseado recrear como bonsai.
LA IDEA
El arbolito protagonista de este artículo es mi primer yamadori de roble, y a pesar de que al principio ocupó un puesto muy destacado en mi colección, fué quedando olvidado en un estante, hasta que un día, conversando con mi gran amigo Leo, surgió la idea de un posible método para mejorarlo.
Con el tiempo, al comentar esta idea con otros aficionados al bonsai y ver su interés por ella, me decidí a escribir este artículo, para que alguién más pueda sacarle partido y corrija los errores que yo haya podido cometer.
LA TÉCNICA
Este método es una mezcla del tradicional injerto de raíces y el injerto por perforación, con la variante de que en vez de usar plantones pequeños de la misma especie, utilizamos semillas, en este caso bellotas.
LA PRÁCTICA
El día de la operación salí a recolectar las bellotas al monte, seleccionando las más idóneas, aquellas que ya habían germinado y tenían la raíz principal (pivotante) bastante desarrollada. A continuación, hice un agujero de un par de milímetros de diámetro en los puntos que necesitaban nuevas raíces, e introduje la raíz pivotante recién germinada de la bellota por este agujero, sellando después con pasta cicatrizante. Para finalizar cubrí todo con musgo de fibra larga y lo humedecí. En unos días empezaron a emerger los nuevos arbolitos, que se cultivaron durante una estación de crecimiento, abonándolos en abundancia.
CONCLUSIONES
He probado esta técnica este año con mucha satisfación, ya que he encontrado lo que me parecen algunas ventajas con respecto a otras técnicas de injerto de raíces:
- Es un técnica facílisima de hacer, apta para cualquier aficionado.
- La efectividad es altísima, en mi prueba un 100% de éxitos.
- No se necesita transplantar el árbol para realizar el injerto.
- La raíz queda unida de forma más natural al árbol.
- El desarrollo del nuevo arbolito, y con él, el de la raíz es enorme: pasa de una raíz de menos de un milímetro de grosor a un plantón de 6 o 7 mm. Así, la nueva raíz queda unida en solo una temporada de creciminto, y la cicatriz que queda al cortarlo es muy pequeña- 1mm de diámetro-; esto también es importante para el futuro aspecto del bonsai.
- En mi prueba el árbol es pequeño y podemos sacar las raíces de la bellota por el otro lado del agujero al momento. En troncos más gruesos, solo necesitamos hacer el agujero de un calibre un poco superior y colocar la raíz lo más profunda posible, ella sola al ir creciendo buscará la salida por el otro lado.
3 comentarios:
Buena entrada kingii...
Me parece muy importante la experimentación con difentes técnicas para enriquecer la "formación japonesa" que llega a occidente...
Una cosa más, el roble al igual que las coniferas tienen micorrizas por lo que al trasplantar a raiz desnuda se perderian, no? como solventas este problema?
Gracias por todo.
Un saludo.
Tamame.
transplanto casi todo a raíz desnuda sin problemas, incluso lavo las raíces con manguera y sin problemas, date cuenta que las micorrizas son un hongo que forma simbiosis conlas raíces por lo que están aderidas a él, e incluso dentro de ellas (endomicorrizas) por lo que se vuelven a desarrollar en poco tiempo sin problemas. Además piensa en cuando un árbol pilla una plaga de hongos dañinos lo difícil que es erradicarla, si los hongos se muriesen solo con unmanguerazo no habría fungicidas...esto es mi opinión, claro, cada uno tendrá la suya, pero bueno, a mi no me da problemas
un saludo
hola alberto saludos
soy adolfo
tengo que decirte que siguo tu blog y toda tu experiencia en japon lo que he encontrado muy excitante ,
sigo tus trabajos
un abrazo adolfo
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